Pero casualmente, por éstos días estamos tomando conciencia, por suerte, del reciclado y reuso de objetos, así que ahora no soy sólo una espectadora, sino que salgo a la búsqueda de cosas que puedan llegar a tener una segunda vida, ya sea con su función original, con una nueva o simplemente como adornos.
Lo que encuentro fascinante de la venta "al mejor postor", es ver como las personas se van felices al obtener lo que fueron a buscar, como si hubieran rescatado un tesoro. Es loco ver la importacia que cobra un reloj, un florero, un sillón, que por otro lado, fue descartado por sus dueños originales...
Pronto inauguraremos en el blog un espacio para contarles más sobre ésta particular manera de aportar a la causa ecológica y que vean objetos que vamos rescatando del tiempo, con su "antes y después".
Hoy les dejo algunos de los tesoros que me gustartía rescatar éste domingo...
Y la joyita del remate, éstos silloncitos. Me los imagino así, tal cual éstan, con almohadones floreados, para una onda romántica, o pintados de amarillo, o turqueza, con almohadones hechos en alguna tela
retro, para levantar cualquier rincón de tu casa. Además, son súper cómodos.
Laura.
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